Tuesday, September 06, 2005

Puedo escribir los versos más tristes esta noche...

I'm sad. Uno de mis más queridos amigos partió hoy para España a hacer su noviciado. Esto significa que él está en el segundo o tercer paso del camino a ser sacerdote. Pertenece a la Orden de Predicadores de Santo Domingo de Guzmán, o sea a los Dominicos. Aunque he visitado su website (www.dominicos.org), no sé mucho sobre ellos. Ahora leo que su misión es "la entrega a la evangelización total de la Palabra de Dios".

Yo conocí a Octavio hace más de tres años en el cumpleaños de Fabiola, una hermana de Comunidad. Nunca se me olvida que a los quince minutos estábamos relajando como los más viejos amigos... No lo volví a ver hasta el cumpleaños de Fabi del año siguiente... jejeje... ese día no hablamos tanto, pero a partir de ahí comenzamos a coincidir y a vernos más.

En estos tres años y pico se desarrolló una amistad tipo cordillera: con sus altas y bajas, pero inamovible. En una ocasión pensé que no sobreviviríamos un terremoto, pero si aquí estoy escribiendo de él, es porque superé la actitud derrotista de entonces.

Yo creo que él conoce a todo el mundo - por lo menos eso parece cuando se pone a saludar-, pero para aquellos que no han tenido la dicha de conocerlo, les contaré un poco sobre él.

Primero lo bueno: Es un cerebro ambulante - una de las personas más inteligentes que conozco. Es graciosísimo, buen amigo, sincero, honesto, desprendido, dulce [cuando quiere], tierno [cuando se sueña con jagua], detallista, entregado, generoso, sacrificado...

Ahora, su humanidad: Es más terco que una mula muy terca, es cascarrabias, orgulloso, iracundo, mal hablado...

Puedo resumir todo eso diciendo que el es único. [Gracias a Dios! jajajaja]

Yo le digo a él [medio en serio y medio en chercha] que los Dominicos no saben lo que se están llevando y que a la semana lo van a devolver. Ellos saben que él es malhabla'o, pero creen que es relajando y se ríen... bueh... yo les voy a hacer un cuento...

Ellos se están llevando a una de las personas más especiales que he conocido... una persona que no puede tocar una vida sin sacudirla... que te hace sonreir aunque no quieras y todo porque su sonrisa es contagiosa... que te hace ser mejor porque te das cuenta de la fe que tiene en ti... que sacrifica su felicidad por la tuya... alguien que no sabe mucho cómo expresar con palabras el cariño, pero cuyos hechos vuelven innecesarias las palabras... que siempre ve lo mejor en el otro... que tiene tanto amor para dar que no le alcanza el tiempo... alguien a quien nunca quisieras olvidar, y que nunca podrías, aunque te empeñaras en hacerlo...

Hmmmm... pensándolo bien, yo creo que sí, que ellos saben lo que se están llevando... y si no lo saben a ciencia cierta, lo van a descubrir... y en ese momento en que se den cuenta, jamás van a dejarlo ir... yo de chepa pude...

El otro día, un par de amigas leyeron el post que escribí de Cristian y me recordaron cuán afortunada soy... Doy gracias a Dios por todos mis amigos... todos ellos son dignos titulares del término "amigo" en su sentido más estricto. Y Octavio no es excepción. Nuestra amistad es tan notoriamente especial que dos hermanas de Comunidad hoy me preguntaron "cómo yo estaba", si estaba "más tranquila"... jajajaja... ellas parece que creían que me iba a dar un nervous breakdown o algo así... jajajajaja.

El tiempo pasa rápido si no piensas mucho en algo... por lo que predigo que este será un laaaaaaaaaaaargo año... jeje... Lo voy a extrañar muchísimo [that's a no-brainer], pero estoy feliz porque el está feliz, siguiendo el llamado que Dios le hizo.... y porque sé que aunque separados, seguiremos siendo Sol y Luna... y que cuando regrese, we're gonna pick up where we left off... as if he never went away...